Por el ritmo de vida actual, la mayoría de nosotros no puede dormir lo suficiente. Sin embargo, cuando logramos dormir mucho tiempo, se siente espectacular.
Pero esto no es cierto para todos, pues puede que algunas personas despierten más mal de un sueño largo precisamente porque el tiempo o el cansancio pueden no ser el problema, sino su cama. Y cuando nuestra cama es el problema, ahí es cuando el sueño nos puede traer realmente problemas a la salud.
Revisa estos problemas que pueden afectar la calidad de tu sueño e intenta arreglarlos lo antes posible:
#1 Colchón irregular
Si siempre te despiertas con el peor dolor de espalda, es porque debes estar durmiendo sobre un temido colchón irregular. Debes buscar y ver qué tipo de colchón se adapta a tus necesidades anatómicas.
Solución: prueba con un colchón más firme
Un estudio realizado entre 313 pacientes con dolor lumbar, quienes tenían un colchón más firme reportaron menos dolor al acostarse en la cama y menos incapacidad relacionada con el dolor, en comparación con el resto. Y es que suavidad no siempre significa comodidad.
#2 Compañía de animales domésticos
Si tu amigo peludo duerme en la cama contigo, no importa que se haya acurrucado apenas unos minutos, porque sus residuos ya están por sobre toda la cama. Y llegaron para quedarse.
Estudios demuestran que dormir co animales puede llevar a reacciones alérgicas, porque el pelo de los animales se cae y permanece en tu cama por un largo tiempo.
Solución: restringir a los compañeros de cama peludos
La Fundación Asma y Alergia (AAFA, por sus siglas en inglés) te sugiere que estés pendiente de estas situaciones cuando se trata de tu espacio privado: “Saca a tu mascota de la habitación. Pasas de un tercio a la mitad de tu tiempo allí. Mantén la puerta de la habitación cerrada y limpia la habitación”.
Puede ser difícil no poder dormir junto a tu querida mascota, pero si le entregas una cama cómoda y agradable, podrán sobrellevar la transición de forma bastante agradable.
#3 Ácaros del polvo
Pensar en los miles de cosas microscópicas que cada noche están en contacto con nuestra piel no es una idea muy agradable, pero es algo que debemos considerar pues nos podrían causar serios problemas. WebMD dice lo siguiente sobre el tema:
Cada persona adulta se desprende de gramos de piel todos los días, y que, por desgracia, son una fiesta para los ácaros, que les gusta comer lo que dejamos atrás. Los colchones, almohadas y ropa de cama son sus lugares favoritos.
Solución: limpia tus sábanas regularmente
Si cada mañana te despiertas con los ojos rojos y llorosos, flujo nasal o picazón e incluso alguna erupción en la piel, pueden ser problemas del ácaro del polvo.
Lava tus sábanas y tus fundas una vez por semana, y mejor aún si tienes algunas de repuesto para poder ir alternando. Siempre la mejor defensa contra estos entes microscópicos es el jabón.
#4 Bacterias
La calidad del aire necesariamente desempeña un importante rol en la limpieza de tu habitación. Y si no la limpias nunca, podrías enfrentar un grave problema de hongos y bacterias.
Solución: limpia tu colchón
Hazlo a conciencia y de forma regular.
#5 Productos químicos
“La Consumer Product Safety Commission comenzó a exigir que todos los colchones vendidos en Estados Unidos sean capaces de soportar 30 minutos de exposición al fuego”, afirman en el sitio de actualidad Mother Jones. Esto es una espada de dos filos, pues son justamente los productos químicos a prueba del fuego que pueden terminar siendo peligrosos para nuestra salud.
Si despiertas con los ojos irritados, es probablemente porque estos productos químicos presentes en tu colchón te están afectando.
Solución: piensa ecológico
Según el mismo artículo de Mother Jones, cada vez “más y más consumidores están buscando colchones de látex natural, de algodón orgánico y de lana orgánica”.
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