Esta es una preparación a la que todos acuden cuando quieren lucirse en la mesa sin complicarse demasiado en la cocina. Es un asado que no defrauda a nadie y nunca lo hará, lo puedes preparar un fin de semana especial o porque sí, pero también puede ser el gran protagonista de las cenas más sofisticadas como cumpleaños o Navidad y Año Nuevo.
El lomo de cerdo es un corte magro que no se caracteriza por ser la carne más sabrosa y jugosa. Es por eso que es de vital importancia el ponerlo a marinar .En esta ocasión, he puesto a marinar el lomo en una mezcla condimentada de vino blanco con aceite de oliva, que no solo le dará sabor y jugosidad, sino que después del horneado será la sabrosa salsa que bañe los medallones de carne.
Ingredientes
1.5 kilos de lomo de cerdo
1 ½ cucharaditas de sal
2 cucharadas de azúcar
Pimienta al gusto
1 cucharadita de tomillo
1 cucharada de salsa inglesa Perrins (salsa Worcestershire)
1oo ml de aceite de oliva virgen extra
1 cebolla mediana
12 ciruelas pasas sin hueso
250 ml de vino blanco
50 ml de agua (opcional)
Preparación:
Poner el lomo en una fuente de vidrio y aliñar con sal, pimienta, tomillo, azúcar, salsa inglesa y aceite de oliva. Cubrir bien con los condimentos y el aceite de oliva y asegurarse que la mezcla se extienda por toda la carne.
Luego, cortar finamente la cebolla y las ciruelas pasas y agregarlas en la fuente. Verter el vino blanco y remover. Tapar la fuente o cubrir con papel film y dejar marinar durante toda la noche en refrigeración. Después de unas horas voltear el lomo para que se impregne con la marinada por ambos lados.
A la mañana siguiente, sacar la carne del refrigerador 40 minutos antes de asarla para que pierda frío. Precalentar el horno a 180 ºC y hornear el lomo durante 1 hora. Pasado ese tiempo, sacar el lomo del horno, dar la vuelta y bañar con la marinada de la fuente. En este momento, hay que fijarse en la cantidad de marinada que queda en la bandeja, en caso de que vean un descenso considerable en el nivel de los líquidos, agreguen un poco de agua. Si no ha habido demasiada evaporación, no es necesario agregar agua, pues lo normal es que la salsa haya reducido un poco.
Cuando el asado esté listo, debe haber suficiente líquido en la bandeja para obtener una salsa; sin embargo, no hay que esperar que sea la misma cantidad que teníamos al principio del horneado.
Continuar con la cocción de la carne. Subir la temperatura del horno a 200 ºC y hornear el lomo por 40 minutos hasta que adquiera un bonito color caramelo. Apenas esté listo, sacar la bandeja del horno y dejar reposar la pieza de carne fuera de la fuente de hornear por 30 minutos antes de cortarla en medallones. Pasar por el colador todos los jugos y vegetales de la bandeja, estrujar muy bien, así obtendremos una salsa con cuerpo y sabrosa.
Probar la salsa y si lo consideran necesario, corregir la sazón con sal o azúcar.
Importante: Si se pasan con la cantidad de agua durante el horneado o les parece que la salsa está muy aguada, una vez colada o filtrada, la pueden poner a reducir en una olla fuego medio por unos minutos.
Ya está listo para servir. Lo pueden acompañar con puré, ya que queda perfecto.
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